"La Asociación de Comerciantes y Empresarios del Bulevar Oretha Castle Haley esun magnífico ejemplo de cómo la colaboración entre particulares, empresas y organizaciones sin ánimo de lucro puede ayudar a transformar un barrio asolado por la desinversión en una comunidad dinámica para todos", ha declarado Patrice Frey, Presidenta y Directora General de Main Street America.

En las dos últimas décadas, el corredor ha pasado de tener estructuras vacías y deterioradas a una actividad bulliciosa. Desde finales de los 90, se han abierto 32 nuevos negocios, se han creado 176 puestos de trabajo y se han invertido en el distrito más de 83 millones de dólares en fondos públicos y privados para rehabilitación, nuevas construcciones, conservación histórica y mejoras de infraestructuras. Recientemente se ha completado en el distrito un proyecto paisajístico de1,9 millones de dólares, tras muchos años de defensa por parte de la comunidad.

"Esestupendo ver los frutos de la labor de todos después de tantos años de duro trabajo. Toda la comunidad se ha unido para revitalizar el bulevar. Hace cinco años nunca habríamos creído que ganaríamos el premio Great American Main Street", declaró Linda Pompa, Directora Ejecutiva de la Asociación de Comerciantes y Empresarios del Bulevar Oretha Castle Haley. "Estamos orgullosos de que el corredor sea ahora una comunidad completa que enriquece la vida de sus residentes, facilitando el acceso a la educación, las oportunidades de negocio, el arte, el ocio y el entretenimiento".

Los eventos de los Primeros Viernes y el Festival anual de Ciudad Central son sólo algunas de las formas en que la Asociación de Comerciantes y Empresarios del Bulevar Oretha Castle Haley ha contribuido a atraer gente a la calle principal. Ambos eventos cuentan con la colaboración de empresas y organizaciones locales para ofrecer comida, bebida y oportunidades culturales y educativas. El Central City Festival celebrará su^11º aniversario en noviembre.

El bulevar Oretha Castle Haley fue un próspero distrito comercial en el siglo XIX. En él se instalaron comerciantes judíos e italianos, médicos afroamericanos y compañías de seguros, además de panaderos alemanes. A principios^del siglo XX, el bulevar albergaba más de 200 comercios y contaba con cinco líneas de tranvía.

La homónima del bulevar, Oretha Castle Haley, desempeñó un importante papel en el Movimiento por los Derechos Civiles y organizó un boicot contra las tiendas que no contrataban dependientes afroamericanos, a pesar de que la mayoría de los clientes del distrito comercial eran negros.

A partir de la década de 1970, la zona entró en declive, siguiendo el camino de muchos barrios del centro de la ciudad que también sufrieron la desinversión, la concentración de pobreza y la falta de oportunidades. Decenas de edificios históricos se deterioraron y fueron demolidos.

A finales de la década de 1990, la llegada de dos organizaciones sin ánimo de lucro al bulevar -el Ashé Cultural Arts Center, que ofrece programas artísticos y culturales que ponen de relieve la contribución de los afrodescendientes, y el Café Reconcile, que forma a jóvenes en situación de riesgo para que trabajen en el sector de la restauración- despertó el interés y el apoyo por la revitalización. Más tarde, una asociación con la promotora local Kathy Laborde ayudó a la comunidad a lograr un desarrollo de uso mixto, de ingresos mixtos y de preservación histórica, al tiempo que proporcionaba un espacio residencial de calidad para personas mayores y permitía a los miembros de la comunidad con bajos ingresos beneficiarse de un barrio mejorado. La Oretha Castle Haley Boulevard Merchants & Business Association fue creada en 1995 por empresas, organizaciones sin ánimo de lucro, residentes y partes interesadas del barrio, como iglesias, para impulsar todos estos esfuerzos.

"Hemos revitalizado nuestro distrito comercial para conservar nuestro pasado histórico, pero también lo hemos hecho avanzar para atender las necesidades de los residentes actuales", dijo Pompa. "Es un verdadero honor recibir este reconocimiento, sobre todo porque los voluntarios han dedicado miles de horas a los esfuerzos por mejorar esta zona y ha funcionado".